Esta no la vivimos nunca. El COVID-19 o coronavirus es una pandemia de la que el mundo entero habla, y el mundo entero la padece. No la vivimos nunca porque si los abuelos entendieran la gravedad del asunto, no nos costaría tanto tratar de convencerlos de que no circulen por la calle. Es muy difícil explicar que tenemos un enemigo que no se ve, y que nos vuelve tan vulnerables. El coronavirus no le dio al turismo la opción de elegir, y le exigió hacer la cuarentena obligatoria.
Privilegios sin autorización
El coronavirus llegó sin avisar.
Se dio el lujo de viajar en avión, en clase turista y en business también. Utilizó todos los medios de transporte sin pagar un peso: autos, trenes, y cruceros. Dio la vuelta al mundo a los besos y abrazos. Se esparció en el aire al grito de un gol y en los pogos frenéticos de algún recital.
Se alojó en hoteles de lujo.
Obligó al mundo entero a poner las reservas sobre la mesa y los dejó a todos rascando la lata.
Puso a los profesionales más importantes de LinkedIn contra la espada y la pared, y más de uno todavía debe estar pensando “menos mal que me fui”.
Reprogramó al fenómeno turístico, (casi) logrando ordenar a la población a la voz de “taza, taza, cada uno a su casa”.
Fue trending topic porque su contenido captó la atención de todas las audiencias. Influencer como pocos, todos comenzamos a seguirlo.
Puso freno de mano a nuestros proyectos, a la actividad laboral y social. Nos mandó a casa a practicar mindfulness, eso que tanto nos costaba implementar por la falta de tiempo o porque siempre tenemos mil cosas para hacer. Nos impuso el mayor de los desafíos: sentir nuestros sentimientos.
Nuevos protocolos, nueva vida
A la fuerza, estamos viviendo nuevos protocolos. Si ya te lavabas las manos, el esfuerzo por la higiene es aún mayor. Como mínimo, todo lo que traes a tu casa de afuera pasa por un protocolo de higiene, y el piso se volvió un lugar sagrado. Digo como mínimo porque es la manera que cada ser humano tiene para colaborar con uno mismo. Cada movimiento se volvió consciente, y parece una tortura, pero la buena noticia es que si lo hacemos repetidamente se transforma en una rutina. Y armemos bien esta rutina porque llegó para quedarse.
Queda el precedente. El proceso de cómo cada área del gobierno de nuestro país desarrolla su gestión durante esta emergencia de salud pública, queda como precedente.
En el mundo también queda el precedente. Es inminente y necesaria una respuesta conjunta que garantice la estabilidad económica y emocional. Así como también la formulación de un protocolo sanitario ante la posibilidad de nuevos brotes del virus o de otros similares, para tomar decisiones inmediatas evitando la propagación.
Que no se corte
La empatía, el sentido común, y la solidaridad de los argentinos. Hubo quienes con impresoras 3D salieron a combatir el coronavirus para salvar vidas creando barbijos, mascarillas y boquillas de respiradores. Otros se convirtieron en los mayores fabricantes de respiradores, y otras empresas se volcaron a la elaboración del alcohol en gel. Escuchamos sobre restaurantes que ofrecen en su municipio viandas gratuitas a médicos, bomberos y recolectores de basura. En los edificios de departamentos los más jóvenes se ofrecen a hacer compras a la gente mayor para evitar su exposición. Y la solidaridad, va creciendo.
La conciencia social. Fue un esfuerzo conjunto el llamado a la reflexión y toma de conciencia sobre las necesidades del prójimo y las individuales. Las redes sociales ayudaron muchísimo a hacer esto expansivo a través del #Quedateencasa. Fue como una especie de clase abierta donde la temática principal era volver a identificar los valores que guían el buen comportamiento humano. Varios reprobaron el multiple choice sobre «qué está bien y qué está mal», espero estudien para la próxima. Un detalle más sobre el tema: hacer la cuarentena obligatoria para aquellos que provenían de países en riesgos es la mejor definición de conciencia social.
Me emociona la solidaridad de los argentinos y la forma que tenemos de reconocer la valentía de nuestros héroes ¿No les pasa? ¿Cómo reaccionan sentimentalmente otras nacionalidades frente a la solidaridad? Desde nuestro lugar nos hacemos escuchar, armando para el record Guinness «la fiesta más corta del mundo» cada noche a las 21:00. En el barrio se aplaude, se grita, y se cacerolea en reconocimiento al personal sanitario, aunque yo lo hago también en agradecimiento a todos los que están fuera de sus casas cuidándonos y sosteniendo las actividades primarias para que nuestro mundo no se nos venga abajo.
💛Muchas gracias💛
Aplausos sin fin a nuestros héroes 👏🏻#Quedateencasa pic.twitter.com/3skB4r3BgL
— mis lugares blog (@mislugaresblog) March 24, 2020
Tirar para el mismo lado. Momento icónico fue ver la portada de todos los diarios del país comunicar el mismo mensaje “Al virus lo frenamos entre todos”. Sin meterme en política, en estos días la ausencia de la grieta violenta nos hizo muy bien. Así también bajamos la curva de la violencia, la indiferencia, el egoísmo, las protestas…
Compartir la cultura y las ideas de manera virtual y gratuita. Con esta oportunidad y modalidad, el que quiere, aprende. Estoy aprovechando el conocimiento de las siguientes plataformas:
- Pulsión Digital: ofrece webinars de marketing digital, comunicación, y emprendimientos.
- UNWTO – Organización Mundial del Turismo: estoy en proceso con el curso de Introducción al Turismo. Me actualiza algunos temas, sobre todo para aquellos que nos recibimos hace ya varios años, cuando no se hablaba de Big Data.
- Campus MINTUR: cursos que ofrece el Ministerio de Turismo y Deportes de Argentina, apuntan más a la teoría que al estudio de casos.
- LinkedIn: donde hacen circular información y cursos muy interesantes. «LinkedIn se volvió mi nuevo Facebook».
Campaña #Salvemoselturismo
Salvemos el turismo es una campaña para que, en caso de tener la posibilidad, podamos posponer la fecha de nuestro viaje, en lugar de cancelarlo.
Después de todo, vamos a necesitar unas buenas vacaciones. Me atrevo a decir que el turismo internacional quedará a la espera del final del ciclo natural del virus. En este sentido, el turismo nacional se lleva las de ganar, y creo que en una primera etapa son los destinos naturales y rurales, donde se evite la alta concentración de turistas, los que pueden verse más beneficiados. Habrá una preferencia por escapadas a destinos cercanos con o sin pernocte, y seguramente con auto propio.
Esta vida slow que nos presentó la cuarentena nos hace reflexionar sobre un turismo sustentable, menos masificado, y más responsable. Es una oportunidad para quien pueda proponer verdaderas experiencias turísticas, esas que nos transforman, que nos aportan un valor, y nos dejan algo para contar a los demás.
Los destinos que se reactiven con el turismo fundamentalmente tendrán que garantizar la atención sanitaria de sus visitantes, y esta vez las empresas que brindan seguros al viajero van a representar el servicio dorado de cualquier itinerario de viaje.
Comunicar la verdad. Será clave para los organismos públicos y mixtos que representan el turismo nacional tomar las riendas de una gestión de crisis para suprimir nuestra percepción de riesgo, aún si el riesgo no existiera; para incentivar la demanda frente al impacto psicológico y sociológico de este confinamiento; y para salvar puestos de trabajo relacionados al turismo, agencias de viajes, conectividad aérea, hoteles, restaurantes, emprendedores… A todos ellos que invirtieron para mejorar las experiencias turísticas en destino y que muchos tienen la alta temporada casi sobre su cabeza.
¿Quiénes serán los primeros que puedan compartir sus fotos de viajes? Esta vez no van a pasar desapercibidos.
Las oportunidades están al alcance de todos
Viajar es un hábito que implementamos como parte de nuestra vida contemporánea, y las oportunidades para sacar a flote el turismo y las comunidades que viven de este fenómeno están al alcance de todos.
Quien desee compartir:
- Sus emprendimientos para el turismo.
- Ideas que puedan ayudar a mitigar el impacto negativo en comunidades locales que viven del turismo.
- Campañas solidarias.
- Acciones y mensajes que estén brindando a sus pasajeros para el futuro que ya llega.
… charlemos y lo compartimos en el blog.
2 comentarios
Muy lindo artículo!! Grandes reflexiones
¡Hola Carolina! Muchas gracias por tu mensaje. Me alegra saber que te gustó el contenido, y te agradezco que ya lo hayas compartido. ¡Un gran saludo! 🙂