El Real Monasterio de la Encarnación parece ser un edificio que nos engaña a primera vista con su su fachada austera, pero resultó el broche de oro del recorrido por la arquitectura del Madrid de los Austrias. Su visita es la posibilidad de conocer lo que ningún otro monasterio suele mostrar, y que custodia tesoros importantes y un milagro que se convierte en una celebración anual.
Su conexión con el Alcázar
Fue la esposa de Felipe III, la reina Margarita de Austria, quien impulsó la construcción del monasterio en 1611, y desde entonces es habitado por las monjas Agustinas Recoletas. Estaba conectado al Alcázar por un pasadizo que permitía a los reyes llegar fácilmente a él. De esta manera se comenzaron a celebrar aquí los actos religiosos de la Corona, así como también los funerales reales.
El edificio es obra de los arquitectos Fray Alberto de la Madre de Dios y Juan Gómez de Mora, quien fuera un gran influyente en la arquitectura Madrileña. En él se observa una austera decoración que coincide con el estilo del Monasterio de las Descalzas Reales, en su bicromía del ladrillo y granito rojo-gris. Para el siglo XVIII el interior fue reformado por Ventura Rodríguez quien se encargó de su re-decoración.
El milagro que guarda el Real Monasterio de la Encarnación
Si tenés tiempo y querés agotar la última ficha de la Madrid Card, date una vuelta que el final de este paseo se pone interesante. Nunca había vista una sala de relicarios como la del Real Monasterio de la Encarnación, y será que no es común que los monasterios abran la puerta de estos tesoros.
Esta Sala de los Relicarios de los siglos XVII y XVIII, custodia 700 relicarios con cráneos y huesos de santos, y el milagro que mencionan es una ampolla que contiene la sangre de San Pantaleón, la cual cada año sufre una transformación aún inexplicable. Todos los 26 de Julio la sangre se vuelve líquida con una tonalidad brillante y permanece en este estado durante el 27 de Julio, día de San Pantaleón, hasta que al día siguiente se condensa nuevamente.
- Más información: www.patrimonionacional.es
- Días y Horarios: Martes a Sábados de 10:00 a 13:00 y de 16:00 a 17:30 / Domingos de 10:00 a 14:00 / Lunes cerrados.
- Si bien la visita al Real Monasterio de la Encarnación está incluida en la tarjeta turística de Madrid Card, la misma no garantiza el cupo, por lo que es recomendable reservar un día y horario. Por casualidad, dimos con uno de los mejores horarios que es el de las 12:15 hs, ya que al final del recorrido y al no haber misa, pudimos sentarnos con el grupo en la nave principal de la iglesia y contemplarla.
Este paseo en Madrid forma parte del itinerario de 30 días de esta primera visita a Europa, que incluye además itinerarios en las ciudades de: Barcelona, París, Londres, York, y Edimburgo.